No enviaron ni uno de los $638.357 millones dispuestos por fuera de lo establecido para cada una de entidades educacionales.
Las universidades y sus “cajas negras”, que sufrieron un recorte total de transferencias discrecionales. También se encuentran en la mirada de algunos de los funcionarios de la Casa Rosada, que no desechan la posibilidad de intervención. En especifico, 10 grandes facultades se encuentran bajo la lupa y son a las que amenazaron con analizar su flujo de fondos porque sospechan que hubo movimientos inusuales antes de asumir el gobierno de turno.
El totalidad de presupuesto anual vigente para todas las instituciones individualmente suma más $700.000 millones, con una ejecución promedio cercana al 40% a esta altura del año. Estas son las partidas de ejecución establecidas para cada universidad. Pero por otro lado, el presupuesto sin discriminar para el conjunto de las universidades es de $638.357 millones. La ejecución en este caso es del 0%. Esto quiere decir que en todo el año no se transfirió ni un peso a las casas de estudio, por fuera de lo establecido para cada una.
Como todo el resto del Estado y sus dependencias, los montos asignados a cada casa de estudios son los mismo del año pasado. Estos serán actualizados en un 70%, según confirmó el Gobierno. No obstante, en los últimos años no se valieron de esos presupuestos fijos para su funcionamiento, sino que negociaron políticamente con la gestión del Frente de Todos para un cuidadoso reparto de fondos sin diferencias.
La situación es crítica para las organizaciones educacionales y en el futuro inmediato no se prevé mejoras. el trato con el gobierno nacional se vuelve cada vez más tenso y genera inquietud en los educadores , administrativos y en los estudiantes en general al rededor de una pregunta: ¿Qué sucederá con la educación?
